Decisiva en la economía de un país, la meta de inflación se refiere a la creación y posterior puesta en marcha de una política monetaria que rige la inflación de una nación. El encargado de llevar a cabo el operativo es el Banco Central, quien dispone un tipo de inflación para el año calendario y trata de conciliarlo con el aumento de precios real a través de variaciones en el tipo de interés y otros instrumentos monetarios.
Dijimos decisiva al principio por que es una práctica que ya ha sido instrumentada en diferentes economías nacionales, tal como es el caso de Colombia, donde los resultados han sido más que positivos, reduciendo el alza de precios en un 5 %.
En el caso de Colombia la inflación estimada para el presente ejercicio fue de un 3%, en tanto que para el año próximo de un 2%. Si comparamos ambos porcentajes con la tasa real, podemos decir del primero que es de un 3.5% mientras que el segundo es de 3%.
Una meta inflacionaria posee las siguientes características:
- Un anuncio público por parte de las autoridades monetarias, del objetivo de inflación a medio plazo
- Una estrategia informativa en la cual se incluyen muchas variables, además de los agregados monetarios y el tipo de cambio, en la determinación de los instrumentos y la postura de la política,
- Una mayor transparencia con el público y los mercados en la comunicación de los planes, objetivos y resoluciones de las autoridades monetaria.
- Un rol preponderante del Banco Central.