La Bolsa española registro ayer la caída más importante, ya que la pérdida fue del 3,89 %, eso equivale a que perdió 8.700 puntos y se piensa que es debido al temor al desaceleramiento de la economía europea y la crisis en USA, además de la caída en las bolsas internacionales; se vivió una jornada en que el riesgo rozó los 400 puntos básicos.
Es así como el principal índice de la bolsa, el IBEX, perdió el 3,89%, y varió la pérdida desde los 351,20 puntos hasta los 8.686,50 puntos, condición desconocida y que no se veía desde comienzos de junio de 2010 cuando la bolsa cayó pero no de forma tan escandalosa.
Al acumular las pérdidas totales, se asciende a un aproximado del 11,89 %. En el resto de Europa las principales bolsas cerraron muy a la baja, el registro es:
- París el 3,9 %
- Londres, el 3,43 %
- Fráncfort, el 3,4 %
Pero justo antes de subastar la deuda española, en la que se dispusieron 3.300 millones de euros, la bolsa cayó al rango de los 9.100 puntos, y esta margen se mantuvo hasta pasado el mediodia por los datos reportados por Lloyds, Rio Tinto y Munich Re, entre otras empresas, pero la mayor caída se registró cuando abrió Wall Street a la baja; igual situación se vió en Londres que a pesar de mantener las tasas de interés en el 0,5% la bolsa perdió el tope de los 9.000 puntos cuando New York toco la campana.
Y como si fuera poco, se sumaron 3 situaciones que hicieron el desplome de la bolsa española algo contundente:
- Las pérdidas en Wall Street.
- El aporte de la Reserva Federal Estadounidense al sistema mediante la compra de deuda.
- El abandono de los precios que frenan las ventas.
Esto perjudico a los grandes valores del mercado español, todos ellos cayeron estrepitosamente:
- Repsol, el 5,71 %;
- Banco Santander, el 4,43 %;
- BBVA, el 4,12 %;
- Iberdrola, el 3,45 %,
- Telefónica, el 2,88 %.