Con el precio de la luz por las nubes tratar de ahorrar energía en verano es sin duda una buena idea. Sin embargo, solemos tener tan sólo dos o tres prácticas o claves para este ahorro. Vamos a tratar de descubrir algunas más que nos permitan intentar rebajar el coste de la factura de la luz.
Resulta muy interesante plantearse el ahorro de energía no sólo como un método de aligerar la presión sobre nuestro bolsillo. También, una manera de contribuir a la sostenibilidad. Éstas son algunas ideas que podrías tratar de poner en práctica.
Tener un uso controlado de los electrodomésticos
Curiosamente, solemos fijarnos en uno o dos electrodomésticos como supuestos culpables del exceso de coste de luz. En verano, sin duda, el aire acondicionado es el gran enemigo de la factura de electricidad. Sin embargo, esto podríamos aplicarlo a otros electrodomésticos, de hecho, al conjunto de los electrodomésticos en el hogar.
Hacer un uso racional de todos nuestros electrodomésticos es muy inteligente. No debemos fijarnos sólo en el aire acondicionado. Un detalle, cerrar mal la puerta del frigorífico puede suponer un coste añadido, como también puede suponerlo, utilizar un lavaplatos a media carga.
Tener en cuenta las horas de luz diurna
A la espera de que cambie en un futuro relativamente cercano el sistema horario, durante el verano en España tenemos un mayor número de horas diurnas. Estas horas diurnas añadidas pueden permitirnos aprovechar mucho mejor la electricidad, fundamentalmente en relación a las luces de la vivienda, etc.
El ahorro puede ser considerable si nos acostumbramos a aprovechar al máximo la luz diurna utilizando lo menos posible la luz artificial durante los periodos de verano, en primavera y parte del inicio del otoño.
Tener un buen aislamiento térmico
Curiosamente, solemos pensar que el aislamiento térmico sólo es una buena idea en el invierno, cuando permite evitar la fuga de calor. Esto es verdad, pero también es verdad que un buen aislamiento térmico puede ayudar incluso en el verano cuando si vas a utilizar aire acondicionado o similar para mantener a buena temperatura.
Tener un buen aislamiento térmico se considera como una de las claves para la eficiencia energética en las viviendas. Es verdad que en viviendas antiguas es más complicado, pero, como poco, deberíamos prestar atención al menos al correcto cierre y aislamiento de ventanas.
Seleccionar buenas tarifas eléctricas
En un periodo de facturas disparadas de electricidad puede parecer un tanto controvertido decir que es necesario seleccionar buenas tarifas. Sin embargo, es absolutamente necesario.
A la hora de elegir las tarifas eléctricas deberíamos fijarnos en dos aspectos diferentes:
Por un lado, la oferta que la compañía o compañías nos hacen: afortunadamente, hoy en día es muy posible elegir entre una amplia variedad de ofertas y operadores. Esto siempre puede hacernos reducir algo el coste de la factura acogiéndonos a la mejor propuesta
Elegir el tramo de tarifa que más nos interesa: no hay un único modelo de aplicación de tarifas.
Comparar distribuidores eléctricos
En la actualidad hay más distribuidores eléctricos que nunca. Las ofertas se multiplican y también se encuentran opciones interesantes como la compra colectiva. Comparar el recibo de la luz con la oferta de mercado puede ser otra buena herramienta de ahorro de energía.
